El poker es un juego de información incompleta, que a medida que va pasando el tiempo, podremos ir tachando algunos casilleros de esa pesquisa, como por ejemplo, el conocimiento de nuestros rivales, lo cual, es fundamental a la hora de desarrollar nuestro juego.
A-K es una mano inicialmente atractiva, aunque debemos tener en claro que, de movida, es solo un proyecto. Si en el flop no conectamos, podríamos estar siendo vencidos hasta por un humilde par de 2.
Un error muy común entre los jugadores amateurs, es continuar la agresión aun sin haber mejorado nuestra mano en las siguientes calles, lo que nos provocará, una inversión grande de fichas, en malos momentos.
Por estas razones, debemos tener en cuenta algunos factores a la hora de jugar A-K:
- Número de oponentes
Cuantos más sean los rivales a enfrentar, mayor será la posibilidad de ir perdiendo en el flop si no logramos conectar un juego. Por ejemplo, asumiendo que subimos con A-K y recibimos el pago de 4 villanos, y en el flop se abre 9-7-10, de los cuales, dos son picas. En esta situación, no deberíamos continuar con la apuesta, ya que es muy probable que alguno de nuestros rivales, haya conectado un par o quizás un proyecto de color o escalera. En este contexto, también es importante conocer a nuestros rivales, aunque más adelante hablaremos sobre ello.
- Posición
Como es sabido, la posición a la hora de jugar al poker es fundamental y puede cambiar los escenarios de nuestro juego. Por ejemplo, si abrimos con A-K fuera de posición y no conectamos en el flop, deberíamos avanzar con cautela. Si nuestro rival de turno realiza una apuesta, habrá que analizar su rango de manos y las pot-odds para ver si es conveniente para nosotros pagar.
En cambio, jugar A-K con posición, la cosa cambia. Si no conectamos en el flop, pero nuestros rivales de turno dan el check, es una situación propicia para realizar la apuesta de continuación, ya que si el villano paga, podremos hacer un bluff en el turn si es que vuelve a golpear la mesa. En este caso estarás jugando mas frente al conocimiento de tu oponente, que con tus cartas.
- Outs
Muchas de las veces que decidamos entrar en una mano, no conectaremos directamente en el flop, aunque si podremos tener proyectos, tanto a escalera como color. En esta situación, si nos enfrentamos a una apuesta pequeña, vale la pena pagar, mas si el proyecto nos da el juego máximo. De todas maneras, debemos tener en cuenta y saber la diferencia de un color con A-K con tres cartas, a una escalera al hueco con ,por ejemplo, un flop 10-6-Q. La primera opción puede llegar a ser una jugada agresiva, caso contrario a la segunda, donde debemos avanzar con cautela.
- Tipo de oponentes
Como dijimos a lo largo de este articulo, el conocimiento de nuestros rivales es primordial, ya que esto nos dará una tendencia de qué hacer con A-K, si no hemos conectado en el flop. Por ejemplo, si nos enfrentamos con un jugador de rango muy abierto, podremos pagar una apuesta en el flop, pero si por ejemplo, las primeras tres cartas arrojan 8-9-Q y nuestro rival es conservador, y realiza una apuesta, es muy probable que este haya conectado juego y vayamos perdiendo, con lo cual, no deberíamos pagar la apuesta.
- Textura del flop
Como dijimos en el punto anterior, si conocemos el rango de nuestros rivales, podremos analizar la textura del flop. Asumiendo que subimos con A-K y nos paga un jugador conservador y a continuación vuela 3-3-6, lo más probable es que nuestro villano no haya conectado nada, y ante una apuesta, este decida tirar su mano.
Las situaciones de juego pueden ser muchas, por eso es que hacemos hincapié en el conocimiento de la mesa a la hora de jugar nuestras manos sin haber conectado en el flop.