Eso fue lo que afirmó el jugador estadounidense en la última entrada de su blog personal.
En la pasada edición de la Serie Mundial de Poker, Neil Blumenfield se retiraba en el tercer lugar consiguiendo el cobro más grande de su carrera: us$ $ 3.398.298. Hoy, a tan solo unos meses de celebrar ese día que, de seguro, quedara grabado en su memoria, y también con la WSOP en marcha, el jugador reflexionó sobre cuanto influye la edad en la competencia.
"Cuando jugué el Evento Principal y fui un November Nine en la WSOP 2015 con 61 años, se hizo un gran alboroto acerca mi edad, porque la mesa final tendía a estar dominada por jugadores jóvenes. El 2015 fue especialmente significativo porque, mientras yo era el jugador más grande de cualquier otra mesa, en la final, fui acompañado por Pierre Neuville, de 73 años, y así es como se volvió un tema de discusión el poker y la edad del jugador.
Se ha vuelto de común conocimiento que debido al desafío físico y mental de afrontar tantos días seguidos disputando poker, este se ha convertido en un juego de personas jóvenes, o al menos, el Evento Principal sería para siempre dominado por jóvenes (presumidamente hombres) de entre los 20 y 30 años de edad [...] Y es cierto ese dicho que dice que lleva mucho tiempo construir un gran stack y sólo un lapso de desconcentración para perderlo todo.
Es más difícil concentrarse 13 horas por 7 días a la semana teniendo 60 años que 22, y estoy convencido que las habilidades y especialmente la dedicación que los competidores traen a la mesa es la clave del éxito. ¿Los jugadores jóvenes tienen mejor resultados porque se pueden concentrar más tiempo, se cansan menos o porque simplemente están más preparados?
Tuve el placer de conocer y tener amistad con muchos jugadores jóvenes. Estos tienen dos cosas en común: Una gran aptitud para las matemáticas y una increíble dedicación a trabajar en su juego. Hoy en día hay muchas herramientas online para que el jugador pueda analizar sus manos [...] y los jugadores de elite trabajan incontable cantidad de horas fuera de la mesa evaluando pequeños matices de jugar un gran número de manos 'interesantes'.
Cuando empecé en Informix a mis 20 años de edad, era creativo de nacimiento. Era soltero, no poseía una casa, no tenía nada y a nadie que me distraiga de mi trabajo. Y la compañía era casi como yo. Joven, soltera, dedicada al éxito. Por ende, le dedicábamos largas horas y socializábamos con las personas con las que trabajábamos. Fuera de la oficina, hablábamos de trabajo. Estábamos siempre pensando en cómo hacer para que nos vaya mejor, tener más éxito. Este era un ambiente que jamás replicaría ni remotamente [...] Tiempo más tarde, empezamos a hablar negativamente de los adictos al trabajo y positivamente acerca de la necesidad de encontrar un balance entre la vida y la responsabilidad.
Los jóvenes jugadores de elite no tratan balancear sus vidas. Son mayormente solteros. Algunos, no sólo no tienen hipotecas, tampoco tienen casas. Solo viajan en su circuito de poker. Sus vidas son desbalanciadas. Cuando no están jugando en persona, están jugando online, y cuando no están jugando online, están preparándose. Estos jugadores tienen grandes habilidades. Conocen la matemática del juego, y además están constantemente analizando para mejorar sus habilidades y para prepararse para afrontar la mayor cantidad de situaciones posibles en un juego donde el número de escenarios es infinito [...]
Estoy convencido que el Evento Principal está dominado por jugadores jóvenes, no porque tengan más "stamina" que los competidores más viejos, si no porque están en un momento de sus vidas, en el que pueden y elijen trabajar más duro, evitar distracciones y estar más preparados al sentarse a jugar. Conozco docenas de jugadores en sus veinte que pasan centenares de horas por semana, más el tiempo de juego, analizando sus juegos [...] Así que sugiero a aquellos que dicen que los jóvenes dominan sólo por ser jóvenes, que, de hecho, dominan porque trabajan más duro en su juego."
¿Estás de acuerdo con las afirmaciones de Neil Blumenfield?